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¿Telaraña o ancla?
- J. Saword,
Puerto Cabello, Venezuela
“¡Qué comparación tan rara!” dirá alguno: “¿Telaraña o ancla?”
Y tiene razón. Pero la comparación está fundamentada en lo que dice la Biblia. En el antiguo libro de Job, el sabio Bildad, hablando de “todos los que olvidan a Dios”, dice que “la esperanza del impío perecerá, porque su esperanza será cortada, y su confianza es tela de araña”, Job 8:13,14. Aquí vemos que la esperanza y la confianza van juntos.
La araña produce de su mismo cuerpo los materiales para la construcción de su casa. Ella gasta todo lo que tiene en tejer y tender su tela. Es una maravilla de la ciencia cómo está dotada del aparato tan fino para fabricar los hilos y arreglarlos simétricamente según un diseño tan bonito y de tal modo que su víctima se pega cuando los pise, pero ella misma no se pega.
Sin duda a la araña le aparecerá que ya tiene todo seguro, y que después de tanto esfuerzo ya va a disfrutar de un porvenir garantizado. Pero ¡que desengaño cuando la señora de la casa pasa la escoba por la pared o el techo, y en un momento acaba con la tela! La araña ha basado su confianza y esperanza en una cosa sumamente frágil e incierta.
Están haciendo precisamente lo mismo todos los que gastan su fuerza, tiempo y vida en las cosas temporales, esperando que por medio de su dinero, negocio, familia, placeres y hasta, en algunos casos, sus buenas obras, les será garantizado un porvenir seguro y feliz. Pero en Job 24.32 leemos que, “Ninguno está seguro de la vida”.
Nada de lo material, como el dinero, trabajo, negocios u hogar es seguro, y la persona que base su confianza y esperanza en tales cosas es como la araña que pone su esperanza en la tela. Tarde o temprano tendrá que descubrir su error fatal.
La muerte puede sorprenderle en un momento inesperado, por un accidente de automóvil o una enfermedad. La tal persona muere en sus pecados sin esperanza; se ha preocupado mucho por lo temporal pero se ha descuidado de lo espiritual. Nunca ha recibido a Cristo como su Salvador personal, y ha muerto con la ira de Dios sobre su alma. “El que es incrédulo al Hijo, no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él”, Juan 3:36.
En cambio, el Apóstol escribe: “Por dos cosas inmutables, en las cuales es imposible que Dios mienta, tengamos un fortísimo consuelo los que hemos acudido para asirnos de la esperanza puesta … la cual tenemos como segura y firme ancla del alma”, Hebreos 6:18. Esta Ancla es Cristo, glorificado en el Cielo, “hecho pontífice eternamente a favor de los que creen en Él”.
¿Cuánto más pesa un ancla que una telaraña? Hay anclas que pesan hasta cinco y más toneladas. ¿Cuánto más dura un ancla que una telaraña, y cuánto mas segura es un ancla que una telaraña?
El que confía en las cosas temporales de esta vida pronto va a perder todo y encontrarse sin nada en la eternidad, mientras el que confíe en el Señor JesuCristo como su único Salvador encuentra en él el verdadero manantial inagotable de gozo y paz ahora, y la base inmutable de su esperanza por la eternidad.